Italia, 1990.
En la ciudad italiana de Innocenti (Florencia), la OMS, UNICEF y delegaciones de más de 200 países se reunieron para tratar de abatir la morbimortalidad materno-infantil y lanzaron una iniciativa conocida como la Declaración de Innocenti. Esta Declaración refleja el contenido del documento original preparado para la reunión y los puntos de vista expresados en grupo y en las sesiones plenarias sobre «Lactancia Materna en los 90’s».
15 años después.
La Declaración de Innocenti de 1990 establece recomendaciones específicas para la década de 1990, mientras que la de 2005 se enfoca en cuestiones a largo plazo, como la promoción de la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses y la lactancia continua hasta los 2 años o más.
La Declaración en si misma
El documento destaca la importancia de la lactancia materna como el mejor método de alimentación para los bebés y promueve medidas para proteger, promover y apoyar la lactancia materna. También hace hincapié en la necesidad de garantizar una nutrición adecuada para los niños, especialmente durante los primeros años de vida. En resumidas cuentas: Dan la recomendación de ejercer la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, seguida de la continuación de la lactancia junto con la introducción de alimentos complementarios apropiados hasta al menos los 2 años.
En su introducción reza:
En los 15 años transcurridos desde la adopción de la versión original de la Declaración de Innocenti, en 1990, se ha logrado un notable progreso en lo que a mejorar las prácticas mundiales de alimentación de lactantes y niños pequeños se refiere. No obstante ello, las prácticas de alimentación inapropiadas, es decir la alimentación subóptima o la ausencia de lactancia materna y la alimentación complementaria inadecuada, continúan representando la principal amenaza para la salud y la supervivencia infantil en todo el mundo. Una mejor práctica de la lactancia materna por si sola ayudaría a salvar las vidas de más de 3.500 niños y niñas por día, más que cualquier otra intervención preventiva.
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Los aquí presentes en Florencia, Italia, en el vigésimo segundo día del mes de noviembre del 2005 para celebrar el 15to. Aniversario de la Declaración de Innocenti sobre la Protección, la Promoción y el Fomento a la Lactancia Materna, declaramos que estas acciones son urgentes y necesarias para velar por un mejor comienzo en la vida de nuestros niños, para lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio para el año 2015, y para el logro de los derechos humanos de generaciones presentes y futuras.
La declaración también aborda cuestiones de protección de la lactancia materna, incluida la regulación de la comercialización de sucedáneos de la leche materna. Se hace un llamado a los gobiernos para que adopten leyes y políticas que protejan a las madres lactantes de la promoción no ética de fórmulas infantiles y garantizar su acceso a información precisa y apoyo.
Otro aspecto destacado es la importancia de crear entornos de apoyo para las madres, que incluyen licencia por maternidad remunerada y lugares de trabajo amigables con la lactancia. Esto permite que las madres puedan combinar la maternidad con el empleo de manera más sencilla y sigan amamantando a sus bebés. También toca la importancia de brindar una educación de calidad a todos los niños, independientemente de su origen socioeconómico o condición social. Reconoce el derecho de los niños a recibir una educación inclusiva y equitativa que promueva su desarrollo cognitivo, emocional y social.
El documento también hace referencia a la protección de los niños contra la violencia, el abuso y la explotación. Destaca la necesidad de adoptar medidas efectivas para prevenir y eliminar todas las formas de violencia contra los niños, así como para garantizar su protección en situaciones de conflicto armado. Aborda la importancia de la participación de los niños en la toma de decisiones que les afectan. Reconoce que los niños tienen derecho a expresar su opinión y a ser escuchados en todos los asuntos que les conciernen, de acuerdo con su edad y madurez.
En términos de impacto, la Declaración de Innocenti ha impulsado el desarrollo de políticas y programas de salud en todo el mundo destinados a promover la lactancia materna. Ha contribuido a aumentar la conciencia pública sobre los beneficios de la lactancia materna y ha ayudado a reducir las tasas de mortalidad infantil y enfermedades en niños. Además, ha fortalecido la colaboración entre gobiernos, organizaciones internacionales y la sociedad civil en la promoción de la lactancia materna.
En resumen, la Declaración de Innocenti es un documento esencial que establece pautas clave para la promoción de la lactancia materna como un pilar fundamental en la salud y el bienestar de los niños. Su influencia se extiende por todo el mundo, guiando políticas y acciones que benefician a innumerables familias y comunidades, al fomentar una práctica que es fundamental para el desarrollo infantil y la salud a lo largo de la vida.
