Hace un año atrás, les compartía con ilusión la incorporación de Sofía a la Escolta Escolar, algo que ella había soñado por mucho tiempo. Pero el tiempo pasó, fue todo un año de cada semana participar en el homenaje a la Bandera, levantarse antes, porque el uniforme llevaba más tiempo de ser vestido, guantes, cintas del cabello, corbata, etc.
Lo dicho, el tiempo pasó, y llegó el momento de entregar su lugar en la Escolta a las niñas que pasaron a sexto.
La ceremonia fue preciosa, emotiva por momentos y al final, cada una obtuvo un diploma como éste, en reconocimiento por su actitud y comportamiento en la Escolta Escolar:
Esta etapa terminó y el círculo se cerró. Nosotros? Felices por ella, que cumplió su sueño de participar. Y algo tristes porque es parte de su adiós a la primaria.
