5 cosas que te dicen «toma un descanso, mamá»

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Casi mitad de año, ya estamos sumergidos en la irremediable rutina habitual. Esperando se terminen las clases, actividades extraescolares, esperando lleguen las vacaciones, visitas a la papelería, los peques recordando a las 10 de la noche la cartulina blanca, etc. Y esto -a veces- puede ser abrumador, abruma sentir que nos movemos en el círculo de la rutina y no hacemos nada especial para nosotras mismas.

Y las mamás pagamos la consecuencia de esto: Si trabajas full-time, la culpa de tener medio cerebro en el trabajo y medio cerebro en los encargos escolares -que la gran mayoría de las veces odiamos hacer- y nos da culpa que nuestras criaturas vayan a la escuela contrabajos o disfraces que nos recuerdan el triste disfraz de Florida de Lisa Simpson.

Si trabajas medio tiempo, te toca llegar y trabajar en los pendientes de la casa, ver si los uniformes están listos para mañana, la cena, el lunch escolar, otra vez la olvidada cartulina blanca…

Y si no trabajas fuera de casa, seguramente, no tendrás todo el tiempo del mundo para hacer todo lo que debes y quieres.

Que cansancio

¿Y quién te prometió que la maternidad iba a ser fácil? Claro que es una locura por un momento, hasta el punto de decir «¿en qué me metí?».

Abrumarse es esperable, pero si la sensación perdura, es momento de hacer algo por una misma. Estás son 5 cosas que te dicen «toma un descanso, mamá»

5 cosas que te dicen «toma un descanso, mamá»

Olvidos reiterados

Ese es el primer signo que me hace prestar más atención a lo que ocurre en mi. El olvido ocasional de dónde se dejaron las llaves o el celular es algo lógico, pero si a esto vas sumando que no encontrar las llaves te quita tiempo para ir al supermercado, o haces las compras corriendo para llegar a tiempo a la escuela por tu peque, como compraste mirando el reloj y no una lista, no tienes todos los ingredientes para la comida. comen más tarde porque volviste a salir por el ingrediente, empiezan a hacer la tarea más tarde porque no comieron a horario, es de noche y apenas van terminando la tarea, los niños sin bañar y tu ya no tienes cerebro para hacer la cena… ¿se ve hacia dónde voy? Un tonto imprevisto como perder las llaves o el celular puede desencadenar una bola de nieve que puede crecer hasta volverse catastrófica. O casi.

Solución: Aparte de una lista o calendario visible en donde anotar pendientes, comienza a delegar pequeñas tareas, acordes a la edad de tú/s peque/s. Esos días de demostrar que eres una madre sacrificada y abnegada, ya pasaron.

No le encuentras sentido al día a día

Caemos en una rutina inevitable. Levantarnos, alimentar a la familia, correr como desquiciados a nuestras obligaciones, regresar cansados, comer, intercambiar 3 palabras, dormirnos. Todo esto nos hace pensar en un espiral descendente, nocivo y son solución. ¿Y quién no se deprime con una perspectiva así? Y cuanto más pensemos que lo que hacemos es rutinario y malo para nosotras, peor nos va a ir. Porque de pensar así a la desmotivación y luego a la depresión, hay medio paso.

Solución: Tenemos que sacarle la connotación negativa a la palabra «rutina». No es mala palabra, no es una condena ni un fracaso. El ser humano es animal de costumbres y la rutina es eso, una costumbre.

Salir más a menudo, dejarte tocar por la luz del sol (vitamina D gratis!) probar situaciones o recetas nuevas, airear la casa, ventilarla y limpiarla aportan nuevas energías y repelen los malos pensamientos. Sí, aunque te suene a recomendación de gurú no amante del aseo personal.

Te duermes de pie, prácticamente

El cansancio no sólo es el físico, de estar corriendo dese la 5:30 de la mañana hasta las 9 de la noche. Ser cabeza de familia o tener un trabajo/jefe exigentes también produce un real cansancio físico, aparte del mental.

Solución: Lo siento, pero para esto, la única solución es dormir. Si los fines de semana son completamente para tus peques, no es condenable que pasen la tarde con sus abuelos o tíos. Una mamá cansada no sirve para nada, ciertamente, sin contar con las mañas -peligrosas- decisiones que se pueden tomar cuando solo funciona media cabeza y la otra, está en el país de los sueños.

Mal humor constante

Si sólo salen críticas de tu boca y sientes que odias a todo el mundo, es muy probable que seas una persona cansa más que una mala persona. Malcontestar, resoplar y responder por lo bajo son todos signos de un desastre aproximándose a gran velocidad y seguramente podrás reconocer que con gusto te tirarías al piso a hacer un berrinche marca camión. ¿Sí o no?

Solución: 5 minutos encerrada en el baño o bañarte sin interrupciones. Tienes que lograr un momento así cada día para conservar tu centro. Lo ideal sería conseguir otros 5 minutos para meditar y así, ver las cosas de otro color. Chatear con tus amigas mientras lloras tus penas y sin sentirte juzgada, es otra excelente solución que recomiendo porque a mi me funciona de maravillas 😉

Te falta tiempo para ti

Esto es mezcla de todo lo descripto en los otros 4 puntos: ¿dónde está tu tiempo de maquillarte, hacerte un peinado nuevo, comprarte un nuevo pantalón o, simplemente, quedarte 30 minutos más en la cama?

Solución Otra vez, no hay nada malo en pedir ayuda. Papá, abuelos, tíos, media tarde con ellos y tú, a lo que quieres, bañarte sin prisas, hacerte manicura, ver una peli… son cosas que no van a dañar a tus hijos. al contrario, se reencontrarán con una mamá renovada y satisfecha por tener su propio tiempo.

Cuando ninguna solución es suficiente

Cuando tienes acceso a estas 5 cosas que no son más que simples soluciones y sientes que no son suficiente, no hay ni pena ni vergüenza en aceptar ayuda de un profesional. Quizás sólo sea una carencia vitamínica o un desequilibrio hormonal. Nunca se sabe. Pero si sientes que hay algo más detrás de la falta de descanso, realmente te debes una visita con un profesional que te guíe en los siguientes pasos. Tú te lo mereces, y tu familia también.

5 cosas que te dicen "toma un descanso, mamá"

Imagen | caos, cansancio, mamá cansada

Soy Viviana, mami de Sofia y de Maia. Dueñas las 3 de F, nuestro amor y rey de la casa. Doula, Social Media Mom & WAHM. Este blog está online de manera ininterrumpida desde 2005.

Discussion2 comentarios

  1. Gracias por este blog. Necesitaba leer palabras que me digan que está bien divertisrse, que está bien tomarse un día o unas horas y que que no tengo que estar 24/7, que no soy una super mamá que puede con todo y que mamá todo lo resuelve. Necesito que me digan que merezco ser feliz y que soy más que una mamá. Gracias por recordarme que también no soy una mala madre por pedir ayuda y por poder decir «no». Un abrazo desde Yucatán, México.

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